Diario Información,Elda,06.07.2013
Los bomberos liberan a un joven cernícalo enganchado en la fachada de la Casa Consistorial

J.C.P.G./ N.S.
Inusual. Los bomberos de Elda están acostumbrados a rescatar todo tipo de animales domésticos y retirar enjambres de abejas. Pero ayer tuvieron que liberar, por primera vez, un cernícalo atrapado en el Ayuntamiento.

Fue la Policía Local de Elda la que requirió la intervención de los bomberos, poco antes de las 13 horas de ayer, para rescatar a un joven ejemplar de cernícalo que se había quedado atrapado en la fachada lateral del Ayuntamiento. Justo donde se encuentra el cercado solar que fue adquirido años atrás para acometer el nunca acometido proyecto de ampliación de la Casa Consistorial.


El cernícalo vulgar, de nombre científico Falco tinnunculus, es un ave de presa diurna y fácil de ver que se alimenta de pequeños pájaros, grandes insectos, reptiles, y roedores, y prefiere un hábitat de campo abierto y matorral. Pero ayer cambió de planes y decidió darse una vuelta por la ciudad ajeno a los muchos peligros que ésta esconde. Cansado de sobrevolar la jungla urbana optó por tomar un respiro. Se detuvo en el poste de una antigua valla con tan mala suerte que la cinta de sujeción de cetrería que llevaba atada a una de las patas se enganchó en la alambrada. Y allí se quedó atrapado el cernícalo hasta que los bomberos colocaron una escalera y uno de ellos subió los tres metros que le separaban del suelo para liberarlo.

Fue entonces cuando se percataron de que en la otra pata tenía una anilla de identificación, pero no era legal, así que se lo llevaron al Parque de Bomberos mientras avisaban a la Protectora de Animales. Allí le dieron de comer unos trocitos de carne asada y agua para aplacar la sed. Y el animal se portó de maravilla. Se le notaba acostumbrado a la presencia humana por lo que es muy probable que se le escapara a su furtivo dueño. Ya por la tarde un miembro del Centro de Recuperación de Fauna de Santa Faz de Alicante se desplazó a Elda para hacerse cargo del cernícalo, que se fue contento y feliz. Quizá su sexto sentido le hacía intuir que, una vez cuidado y estudiado, recuperará la libertad perdida. Una libertad de la que probablemente nunca haya disfrutado porque este tipo de aves suelen ser usadas por principiantes para introducirse en la cetrería. Y desde ayer los bomberos de Elda tendrán que añadir este episodio a su lista de los rescates más inusuales.